Una receta para el caos - por Marcos Benitez Rubianes


A pocos días para la navidad, el mundo se tiñe de sangre nuevamente, un mundo  que cada vez se nos parece más caótico. Nos queda la duda de si es el gran flujo de noticias que nos llegan sin pausa desde todo el mundo que lo hace parecer así, ya sea un reportero profesional conectado a su central de noticias, o un simple transeúnte que se encontraba en el momento justo para captar con su móvil inteligente lo suficiente para volverse viral en solo segundos. Lo que si es cierto que estamos atomizados por noticias, principalmente negativas, quizás hace unos 50 años con mayores limitaciones al momento de distribuir la información globalmente, solo nos llegaban aquellos titulares de impacto global, hoy en día basta saber dónde buscar para enterarse de lo que sucede en cualquier recoveco del mundo conectado.

La semana que aún no ha terminado comenzó con hechos de magnitud y usando el mismo vocablo latín “magno”, podemos referirnos primeramente al magnicidio ocurrido en Ankara este lunes donde un ex-policía Turco de 22 años asesino a sangre fría y por la espalda al embajador ruso en el país Otomano, Andrei Karlov quien se encontraba inaugurando una exposición fotográfica sobre el país Ruso en Ankara. Así como una ironía de la vida, su últimos momentos de vida quedarían registrados por las cámaras fotográficas de varios periodistas que se encontraban registrando el hecho. El atentado se enmarca en la lucha contra el terrorismo en Siria, del cual Rusia es principal soporte del régimen de Bashar Al-Assad. Asi como un tablero de ajedrez, los que se encuentran detrás del atentado (hasta hoy no confirmados) quisieron poner nuevamente en jaque las relaciones Ruso-Turcas, las cuales se encuentran en pleno resurge luego de los hechos ocurridos en los pasados dos años. Lo único que es cierto es que el asesino grito luego de cometido el acto, “No se olviden de Aleppo, no se olviden de Siria”.

Y como olvidarse de Aleppo, si bien es una lucha encarnizada de hace varios meses, ha sido noticia esta semana también, ya que las fuerzas pro-régimen o pro-gobierno según como ustedes gusten, triunfaron finalmente en Siria al retomar el último gran bastión rebelde, la ciudad de Aleppo. Siria para mí significa la mayor guerra de la historia del S XXI, no quizás tanto por el tamaño de sus batallas sino por el significado geopolítico que tendrá para el resto del siglo por venir. Rusia quien luego de la caída del muro de Berlín ha buscado reclamar su lugar de Superpotencia comenzó a dar atisbos importantes luego de escaladas beligerantes en lugares recónditos como Georgia o en la lucha contra los Chechenos, pero el más reciente fue su infiltración en la Península de Crimea, y su influencia en la guerra civil Ucraniana. De todas formas eso no es nada comparado con lo que sucedió en Siria, donde Rusia se aclama como al mayor vencedor conjuntamente con Bashar Al Assad, su principal aliado en la región conjuntamente con Irán. Es que si bien Obama y la OTAN dieron todo, hasta apoyar a los radicales Sirios, para poder retomar el control de la zona, esta vez no les salió el plan como en Irak o en Libia, en esta oportunidad la carta se la queda Putin y con ello se abre un mapa nuevo. Un mapa que vamos a analizar en breve una vez que los polvos post-bélicos Sirios se apacigüen. 

El ultimo hecho que nos llena de estupor sucedió en Berlin, donde en un simbólico ataque a la cultura y valores cristianos, un camión de transporte pesado se metió de lleno en un mercado navideño dejando como saldo 11 muertos dentro del mercado, más el propio chofer del vehículo que fue asesinado por los terroristas antes de secuestrarle el vehículo. Como recordamos Alemania fue el último lugar donde hubieron hechos de terror, y ya uno mismo pensaba que la situación se había calmado, inteligentemente estas semillas del mal saben como hacer las cosas para generar pánico, y que mejor forma que recordarle a toda Europa que no van a tener unas fiestas en paz.

En este mundo que hoy vivimos se abren muchas interrogantes, como ser; ¿a donde marcharan a luchar todos los sobrevivientes de ISIS en Siria?, bien entrenados, con mucho conocimiento en guerra y rebelión urbana, ¿dónde reubicaran los millones lavados por los millonarios Kuwaities, Saudies, y demás personas que ya por una ideología radical religiosa o política quieren ver el mundo arder en llamas?. Lo cierto es que hoy tenemos la receta para el Caos, y faltan líderes mundiales que tengan la visión y con perdón de la palabra, los cojones para poder remediarlo a tiempo, mientras tanto serán los niños e inocentes los que paguen el mayor precio, el de perder la vida. 

Marcos Benitez Rubianes
Corresponsal en Europa

*Originalmente publicada el 22 de diciembre de 2016

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