El destino quiso que naciera aquí y hoy festejemos el día de los trabajadores. Esto no pasa en Canadá y EEUU. En este 1° de mayo me viene el recuerdo de todos los trabajadores.
Todos aquellos que les duele día a día no poder llevar el pan a la mesa. A los que la sociedad barre hacia afuera. La angustia y el resentimiento crecen en un mundo que cada día consume más y donde algunos sienten no tener lugar. Sus hijos, que no tienen la culpa de lo que pasa pero que muchas veces la sienten. Sus esposas. La vergüenza y la incertidumbre de no saber que pasará mañana. Porque siempre hay una familia atrás.
También es el día de aquellos que trabajan sin recibir un sueldo a cambio. Idealistas, luchadores por su futuro y los que están pagando "derecho de piso". Jóvenes que empiezan y veteranos que vuelven a empezar. Viejos trajes gastados y dos boletos de ómnibus para llegar a la entrevista. Porque siempre hay una familia atrás.
Porque siempre hay una familia, la de sangre, la del club, la de la cuadra, la del bar, la de ayer y la de mañana.
Es muy cierto lo que dices , Felipe y yo estaría entre los que empiezan de nuevo con 30 años la Universidad y a trabajar luego de años de ama de casa y al lado de mi mamá cuidándola, y a voy a seguir cuidando solo que para ello necesito un futuro para mi , sino corro el riesgo de enfermarme de soledad y exclusión social. Saludos!!!!
ResponderEliminarNunca vas a estar sola Carolina, la sociedad a veces barre para afuera pero tampoco vas a estar excluida. Gracias por leer esta columna y tu comentario, como siempre muy inteligente y sensible. Fuerte abrazo!!
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