Marrucecos, Turquía y Uruguay a la vanguardia energética - por José María Gimeno


El año pasado, se instalaron en todo el mundo unos 250 MW de almacenamiento de electricidad a escala de servicio público frente a los 160 MW de 2014. Además, por primera vez, las inversiones en energía renovable en naciones en desarrollo y economías emergentes superaron a las de los países desarrollados.

Marruecos, Turquía y Uruguay se unieron a la lista de países que invierten más de mil millones de dólares en 2015. En general, las inversiones de países en desarrollo el año pasado fueron 17 veces superiores a las de 2004, mientras que entre los países desarrollados, la inversión en Europa descendió un 21 por ciento, pasando de 62.000 millones en 2014 a 48.800 millones de dólares en 2015, la cifra más baja del continente durante nueve años a pesar de las inversiones récord en proyectos de energía eólica marina.

En Estados Unidos, subió un 19 por ciento, hasta 44.100 millones de dólares y la inversión en Japón fue la misma que el año anterior en 36.200 millones de dólares.

Se nota un cambio en la inversión en energías renovables, hacia los países en desarrollo y lejos de las economías desarrolladas. Esto puede atribuirse a varios factores: la carrera de China por la energía eólica y solar, el rápido aumento de la demanda de electricidad en los países emergentes, la reducción del costo por la elección de las energías renovables para satisfacer esa demanda, el lento crecimiento económico en el mundo desarrollado y los recortes en los subsidios de apoyo en Europa.

El mercado de las energías renovables sigue estando dominado por sistemas fotovoltaicos solares y eólicos. No obstante, las energías renovables, excluidas las grandes centrales hidroeléctricas, aún representan una pequeña minoría de la potencia instalada total del mundo (aproximadamente una sexta parte, o el 16,2 por ciento), pero la cifra sigue subiendo. Por su parte, la electricidad real generada por esas energías renovables fue del 10,3 por ciento en la producción mundial en 2015, frente al 9,1 por ciento en 2014. Estas cifras son alentadoras.

José María Guimeno

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